El mundo está cambiando continuamente y a su paso las nuevas generaciones traen consigo una revolución sexual. Comienzan a experimentar, conocer y activarse sexualmente a muy temprana edad; es por ello, que hablar con nuestros hijos es sumamente importante, ya que evitará embarazos no deseados o enfermedades por transmisión sexual.
En promedio, 4 de cada 10 estudiantes de bachillerato iniciaron su vida sexual en la secundaria,según datos brindados por la SEP. Esta información revela que la edad de la primera relación sexual ha ido reduciendo considerablemente.
Hablar de este tema es tan incómodo para el adolescente, como para los padres, los cuales se paralizan por la creencia errónea de que hablarles sobre sexualidad puede alentarlos a comenzar una vida sexual temprana.
Sin embargo, algunos psicólogos y sexólogos afirman que hablar con los hijos sobre sexo, incluso darles condones, no los obliga a tener sexo anticipado. Lo que sí provoca, son las probabilidades de ser abuelos antes de tiempo.
Una realidad que muchos padres no han querido aceptar, es que con o sin educación sexual, la mitad de los estudiantes de último grado de bachillerato son sexualmente activos y necesitan información actualizada, acceso a anticonceptivos, atención sobre la prevención de embarazos y a problemas por transmisión sexual.
Estas son algunas de los consejos que debes tomar en cuenta:
1. Sé un padre presente
Si eres partícipe en la vida de tus hijos, tienes un 90% del camino ganado. Ya que esto te ayudará a tener un acercamiento y entrar en un estado de confianza más rápidamente. Que no te asuste hablarlo y posponerlo todo hasta que tu hijo tenga una pareja. No hay una fórmula ideal para cubrir muchos temas en una sola conversación.
2. Escoge el momento adecuado.
Una excelente justificación para entablar una conversación sobre el tema, es durante el primer flechazo o enamoramiento. Comienza por tocar temas suaves, donde pueda abrirse con sus sentimientos y emociones, y que mediante esto, puedan construir una zona de confianza para tratar asuntos relacionados con la actividad sexual.
3. Deja de lado tu propia vergüenza.
Comienza por olvidarte de los tabús y falsos cuestionamientos, es mejor entrar en confianza con nuestro hijo, hablarlo y evitar consecuencias.
4. La forma de hablar es clave.
Trata de hablarle con tranquilidad y de lo más normal posible, para que sea una conversación cómoda para ambos.
5. Es mejor ser honesto con la incomodidad.
Si te resulta muy incómodo comenzar con la conversación y no es lo tuyo hablar de estos temas, es mejor aclararlo desde el principio y partir desde ahí.
6. Investiga sobre los posibles cuestionamientos.
Es recomendable reflexionar e investigar sobre el tema. Aclarar nuestras propias dudas también puede ayudar a que todo se esclarezca.
7. Escucha a tu hijo.
Ten la mente abierta y trata de responder con toda certeza sus dudas y preocupaciones. Escucha sus pensamientos, emociones y sentimientos, esto te dará una idea más precisa sobre sus cuestionamientos.